Washington, DC, diciembre 13 de 2022. En el marco de la sesión de Consejo Interamericano para el Desarrollo Integral (CIDI), Colombia asumió la presidencia de la Comision de Asuntos Migratorios-CAM- de la OEA. En su intervención, la representante alterna Sandra Mikan, señaló el compromiso del gobierno de Colombia en materia de migración frente a los desafíos que suponen los flujos migratorios a nivel global y regional. Así mismo, la pertinencia que esta instancia profundice en la reflexión y acciones respecto de la responsabilidad compartida que como países de origen, tránsito, destino y/o retorno tienen los Estados miembros de la Organización.
En tal sentido, se destacó por la representante que, además de propiciar políticas y acciones que permitan potenciar las contribuciones de los migrantes a través de su dignificación desde una perspectiva de derechos; es fundamental profundizar el abordaje de la migración desde un enfoque multidimensional con énfasis en el respeto de los derechos humanos y bajo los principios de solidaridad y responsabilidad compartida, superando las aproximaciones que securitizan su abordaje. Señaló que se debe propiciar el enfoque humanitario, el respeto a la libertad de movilidad y el robustecimiento de la gobernanza migratoria.
El mandato que desarrolla la CAM se orienta por la resolución del CIDI en su línea estratégica: “Impulsar la promoción y protección de los derechos humanos de los migrantes, incluidos los trabajadores migrantes y sus familias, de conformidad con el Programa Interamericano en la materia, para potenciar su contribución al desarrollo”, que adoptaron los Estados miembros en la Asamblea General de la OEA en Lima en octubre de 2022. Esta resolución establece, entre otros, la pertinencia de la recepción y regularización de las personas migrantes; su inclusión social, económica y laboral para su contribución al crecimiento inclusivo y desarrollo sostenible. Del mismo modo, la prevención del racismo, la xenofobia y la discriminación en contra del migrante; así como los desafíos de la movilidad humana causados por los efectos de los desastres naturales y degradación ambiental agravada por el cambio climático.
El reto para la CAM, señaló Colombia, es seguir contribuyendo a la magnitud y complejidad de los procesos de movilidad humana que hoy experimenta la región, y por tanto, la pertinencia de fortalecer la capacidad estratégica, operativa e institucional de los Estados, que dé respuesta oportuna a las necesidades apremiantes en materia de acceso a derechos e integración de una población en alto grado de vulnerabilidad, lo que incluye mujeres, indígenas, comunidades afro, pero especialmente el interés superior de los niños, niñas y adolescentes.
Por último, se destacó la necesidad de propiciar respuestas coordinadas con respecto a la movilidad humana con los diferentes actores, en el ámbito multilateral, que incluye banca multilateral de desarrollo, organizaciones no gubernamentales, sociedad civil, sector privado, entre otros para el acercamiento de agendas en materia de regularización de migrantes y su inclusión social, económica y laboral.
